La regularización de las viviendas vacacionales
La regularización
de las viviendas vacacionales
Jose Fernando Cabrera
Personalmente consideramos que había que regularlas, y la normativa aprobada resuelve parte de los problemas que se plantean y plantearan en el futuro con esta modalidad.
El turismo es y sera el motor económico de las Islas y su peso en la economía puede incrementarse en el futuro, generando más riqueza y empleo. Pero para ello hay que continuar con la estrategia de renovación, formación cualificada y mejora del servicio, renovación del espacio turístico, y con un gran Plan de Infraestructuras por redactar, que contemple la la señalización turística, ajardinamiento e iluminación de carreteras, mejora y construcción de nuevas playas, paseos marítimos, y modificación de los Planes Insulares para facilitar la construcción de parques temáticos, marinas y campos de Golf.
La búsqueda de la excelencia en todos los aspectos, nos permitirá atraer mas turistas, y lo que es mas importante, de mayor poder adquisitivo que los hay en Europa, y que ahora pasan sus vacaciones en Florida, Dubai, la Costa Azul, Tailandia y Marbella.
Dicho sea que en mi opinión la regulación era necesaria, y que el Decreto resuelve parte de los problemas planteados, su redacción ha sido muy precipitada.
Estimo que hubiera habido que empezar haciendo un inventario de su potencial, de las diversidad de unidades actualmente en explotación y sus características, vivienda unifamiliar aislada, chalet adosado, piso en un bloque de vecinos… porque sus particularidades y las problemáticas que pueden plantear son muy diferentes.
En este sentido cuando se iniciaron los debates los grupos favorables a la legalización afirmaban que afectaban a 5.000 viviendas, unos meses después a 15.000 y en el ultimo al que asistí 50.000, y un numero de pernoctaciones en Tenerife de 15 millones, casi la mitad de las de la planta planta hotelera, lo que de acuerdo a las estadísticas de Turismo de Tenerife no es posible.
Se asimila a la modalidad extra hotelera y se las sujeta al cumplimiento de las normas sectoriales que les sean de aplicación.
No se va en la linea de la búsqueda de excelencia que debe ser nuestra guía, pues no impone características de calidad alguna a las zonas comunes de los edificios de vecinos donde vayan a desarrollarse, por desconocimiento de la realidad, al no haberse realizado inventario ni estudio alguno de las que están en explotación. Introducir en el mercado algunas viviendas en edificios de baja calidad, deteriorara la imagen de Canarias y va contra la política de renovación y mejora.
Al desconocerse lo que se legisla, se las trata en el Decreto como un producto único, ojalá me equivoque, va a generar muchísimo trabajo en las inspecciones de turismo y trabajo y gran conflictividad en los juzgados.
Atisbo importantes problemas con el cumplimiento del Convenio de Hostelería, las normativas de piscinas, control de legionella, incendios…
Por ejemplo en un gran edificio el que se exploten turísticamente gran parte de las viviendas y el resto sean residenciales, lo que es perfectamente factible, quien es el responsable de un accidente de un turista en las zonas comunes, que seguro lo cubre, quien es el responsable del cumplimiento de la normativa de piscinas, sanitarias…
Los que explotan las viviendas alquiladas a turistas, cual de ellos si la explotación es múltiple, o el Presidente de la Comunidad, ajeno a esta actividad económica.
Ex Presidente de ASHOTEL. Consul de Austria de 2011 a 2015. Presidente y fundador desde 2011 del Foro de Amigos del Sur de Tenerife. Autor del libro “Posibilidades industriales de Tenerife»