Clownbaret y las 7 cualidades de un verdadero payaso
Clownbaret y las 7 cualidades de un verdadero payaso
Véronica Martín León
Adentrándome en la historia de Clownbaret, he sentido que estas 7 cualidades son las mejores de un payaso:
1. Un payaso no se esconde.
A veces, la gente no se maquilla o se disfraza para ser otra persona si no para mostrar fuera una parte de ellos que solo la máscara puede sacar. Es una paradoja que cualquiera que se haya disfrazado de un personaje que le fascina, o del género contrario o de algo opuesto a su personalidad aparentemente dominante, sabe. Como dijo Machado: “Lo esencial carnavalesco no es ponerse la careta, sino quitarse la cara”.
Quizá por eso nos fascinan los payasos. Porque intuimos una verdad que solo una nariz roja, unos zapatos enormes y una emoción pura puede revelarnos.
2. Un payaso nunca se rinde
Cuántas veces hemos visto a un payaso caer y levantarse, caer y levantarse. Nos divierte esa supuesta torpeza y esa tierna obstinación en seguir adelante con su plan inicial. Pero lo cierto es que los payasos representan, entre otras muchas cosas, la semilla de lo que ahora llaman resiliencia, la actitud asertiva frente a la frustración y la adversidad.
3. Un payaso siempre es libre
En primer lugar, porque sigue su propio criterio y si se equivoca, es su problema. No es el cordero que sigue al rebaño. Tiene sus ideas claras. En el fondo es un rebelde. Ama la humanidad. Por eso, piensa por sí mismo.
4. Un payaso es un soñador
La realidad siempre puede soñarse, reinventarse. La realidad no es un destino inexorable, es un laboratorio de posibilidades.
5. Todos llevamos un payaso dentro.
Este icono mundial nos representa a todos, de alguna manera, al menos a una parte esencial de un ser humano.
6. Un payaso no existe sin un público presente.
7. Un payaso es inmortal
A pesar de las dificultades presentes y futura. Brian sabe bien que el payaso no morirá jamás porque es dúctil como el corazón humano.

Comunicadora. Bloguera. Contadora de historias.